La tarta de manzana con crema pastelera necesita de pocas presentaciones y es que no se puede brillar más, verdad? Si a alguien no le gusta esta tarta se lo debería dejar mirar-)) Queda súper jugosa, dulce sin ser empalagosa, sin ningún exceso de grasa y sin ser ligera del todo no deja sensación de empacho. Además resulta muy fácil de veganizar, con hojaldre vegano, bebida vegetal y sustituto de huevo, queda exactamente igual de rica. Si queréis tener a toda la family hechizada y bajo los efectos de un dulce embrujo, seguid estos sencillos pasos.
Empezaremos horneando la masa quebrada.
Precalentamos el horno a 220º con calor por arriba y por abajo. A continuación, ponemos en un molde papel vegetal y sobre él, la masa. Le vamos dando forma redondeada sobre los bordes del molde y lo cubrimos con otro papel vegetal que cubriremos de garbanzos para que impidan que suba, aunque no suele subir como lo haría el hojaldre.
Estos garbanzos los podemos guardar y usar para el mismo fin durante un montón de veces.
Ahora lo horneamos durante unos 15 minutos.
A continuación vamos a preparar la crema pastelera.
Para ello separamos 150 ml de bebida de soja y calentamos el resto junto con vainilla y la piel de un limón.
Calentamos sin que llegue a hervir, y justo antes de que esto ocurra, apagamos el fuego y dejamos que emulsione con la tapa puesta durante media hora.
Ahora, batimos las yemas junto con el azúcar y disolvemos el almidón de maíz con la bebida de soja fría que habíamos separado y el chorrito de nata de soja.
A continuación, añadimos las yemas batidas con el azúcar a la emulsión que teníamos reposando (recordad sacar la piel de limón) y removemos sin parar con el fuego medio-bajo.
Ahora podemos añadir también la mezcla de almidón de maíz y remover y remover hasta que espese. Dejamos atemperar.
Una vez lista la crema, la verteremos sobre el hojaldre ya previamente horneado y la cubriremos con la manzana cortada muy finita y solapando una capita con otra.
Por último, ponemos en un cazo tres partes de mermelada por una parte de agua y calentamos hasta conseguir el almíbar. Cubrimos la manzana con él, con la ayuda de un pincel.
Una vez listos todos estos pasos, nos queda el horneado final.
Metemos nuestro delicioso postre en el horno a unos 200º con calor por arriba y por abajo y horneamos hasta que veamos que la manzana se va dorando.
Vaticino que la espera hasta que se enfríe se os va a hacer larrrrrrrrrrga, peeero, nada que merezca la pena es fácil, no??
Muy buen provecho súper reposter@s!!!
Ingredientes
Pasos
Empezaremos horneando la masa quebrada.
Precalentamos el horno a 220º con calor por arriba y por abajo. A continuación, ponemos en un molde papel vegetal y sobre él, la masa. Le vamos dando forma redondeada sobre los bordes del molde y lo cubrimos con otro papel vegetal que cubriremos de garbanzos para que impidan que suba, aunque no suele subir como lo haría el hojaldre.
Estos garbanzos los podemos guardar y usar para el mismo fin durante un montón de veces.
Ahora lo horneamos durante unos 15 minutos.
A continuación vamos a preparar la crema pastelera.
Para ello separamos 150 ml de bebida de soja y calentamos el resto junto con vainilla y la piel de un limón.
Calentamos sin que llegue a hervir, y justo antes de que esto ocurra, apagamos el fuego y dejamos que emulsione con la tapa puesta durante media hora.
Ahora, batimos las yemas junto con el azúcar y disolvemos el almidón de maíz con la bebida de soja fría que habíamos separado y el chorrito de nata de soja.
A continuación, añadimos las yemas batidas con el azúcar a la emulsión que teníamos reposando (recordad sacar la piel de limón) y removemos sin parar con el fuego medio-bajo.
Ahora podemos añadir también la mezcla de almidón de maíz y remover y remover hasta que espese. Dejamos atemperar.
Una vez lista la crema, la verteremos sobre el hojaldre ya previamente horneado y la cubriremos con la manzana cortada muy finita y solapando una capita con otra.
Por último, ponemos en un cazo tres partes de mermelada por una parte de agua y calentamos hasta conseguir el almíbar. Cubrimos la manzana con él, con la ayuda de un pincel.
Una vez listos todos estos pasos, nos queda el horneado final.
Metemos nuestro delicioso postre en el horno a unos 200º con calor por arriba y por abajo y horneamos hasta que veamos que la manzana se va dorando.
Vaticino que la espera hasta que se enfríe se os va a hacer larrrrrrrrrrga, peeero, nada que merezca la pena es fácil, no??
Muy buen provecho súper reposter@s!!!