Con la receta que os traemos hoy os lo podéis jugar todo a una carta porque es éxito asegurado.
Es verdad que resulta fácil contentar a nuestros comensales con un plato de pasta, ya que le gusta a la mayoría, pero estos ravioli rellenos apuesto a que gustan por unanimidad.
Como sabéis admiten cualquier tipo de relleno pero hoy los vamos a rellenar de borraja, tan sencillo como eso. Quedan suaves y delicados pero con mucha personalidad.
Si no encontráis podéis rellenarlos de acelgas pochaditas y bien escurridas, de espinacas, a vuestro gusto.
En caso de que estuvieran fuera de temporada o no encontrarais los podríais rellenar con vuestra verdura favorita, aunque yo os insisto que estos son de cata obligatoria.
Empezamos? Vamos a ello!
Empezaremos preparando la masa. Cogemos la harina, la tamizamos y la ponemos en un bol, y le añadimos los dos huevos y la cucharada y media de aceite. Si en el amasado vemos que nos queda muy reseca, le añadimos un huevo más, depende de lo que demande la harina. Tiene que quedarnos una masa elástica, no pegajosa. Una vez bien amasadita, la dejamos reposar mientras preparamos el relleno y la salsa.
Para el relleno y la salsa lo que haremos es limpiar la borraja y cocerla al vapor hasta que quede al dente. No os indico un tiempo porque depende del grosor del tallo tardará un tiempo u otro, pero ronda entre los 8-15 minutos, mejor ir probándola.
Una vez lista la dejamos escurrir muy bien y reservamos el caldo.
Una vez fría, si fuera necesario la escurrimos con la manos, la ponemos en un plato y la mezclamos con el queso.
Ahora vamos a preparar la salsa.
Calentamos aceite en una sartén y rehogamos la cebollita picada. Una vez lista, le añadimos los piñones y dejamos que se doren un poco. A continuación añadimos la borraja que habíamos cocido antes y le damos unas vueltas.
Ahora añadimos la harina y removemos bien hasta que se tueste. A continuación agregamos el vino, un chorrito de bebida vegetal y la cantidad necesaria de caldo de cocción de las borrajas hasta que nos quede la textura de salsa.
Salpimentamos y trituramos con la batidora eléctrica. Probamos y corregimos de sal si fuera necesario.
Ya tenemos todo lo necesario para empezar a formar ravioli.
Vamos separando bolas de la masa que teníamos reservada y las vamos pasando por la máquina de pasta hasta que queden bien finas, si no quedará un ravioli muy basto.
Enharinamos una superficie de trabajo y depositamos ahí la primera lámina de pasta. Repartimos un poco de relleno sobre ella y le ponemos otra “sabanita” de pasta encima. Sellamos un poco con los dedos los bordes de los montoncitos que nos han quedado y ya podemos cortar los primeros ravioli. Y así seguimos hasta que gastemos toda la pasta y todo el relleno.
Una vez formados todos, ponemos agua con sal a hervir y cuando llegue a ebullición, introducimos nuestros ravioli caseros y los hervimos durante aproximadamente 4-5 minutos.
Una vez cocidos, los escurrimos, les ponemos nuestra salsa deliciosa y a la mesa a ponerse las botas!
Ya veréis como ha valido la pena entretenerse. Siento deciros que no volveréis a comprar más de los que venden elaborados, si es que los habéis comprado alguna vez…
Buen provecho chefs!!
Ingredientes
Pasos
Empezaremos preparando la masa. Cogemos la harina, la tamizamos y la ponemos en un bol, y le añadimos los dos huevos y la cucharada y media de aceite. Si en el amasado vemos que nos queda muy reseca, le añadimos un huevo más, depende de lo que demande la harina. Tiene que quedarnos una masa elástica, no pegajosa. Una vez bien amasadita, la dejamos reposar mientras preparamos el relleno y la salsa.
Para el relleno y la salsa lo que haremos es limpiar la borraja y cocerla al vapor hasta que quede al dente. No os indico un tiempo porque depende del grosor del tallo tardará un tiempo u otro, pero ronda entre los 8-15 minutos, mejor ir probándola.
Una vez lista la dejamos escurrir muy bien y reservamos el caldo.
Una vez fría, si fuera necesario la escurrimos con la manos, la ponemos en un plato y la mezclamos con el queso.
Ahora vamos a preparar la salsa.
Calentamos aceite en una sartén y rehogamos la cebollita picada. Una vez lista, le añadimos los piñones y dejamos que se doren un poco. A continuación añadimos la borraja que habíamos cocido antes y le damos unas vueltas.
Ahora añadimos la harina y removemos bien hasta que se tueste. A continuación agregamos el vino, un chorrito de bebida vegetal y la cantidad necesaria de caldo de cocción de las borrajas hasta que nos quede la textura de salsa.
Salpimentamos y trituramos con la batidora eléctrica. Probamos y corregimos de sal si fuera necesario.
Ya tenemos todo lo necesario para empezar a formar ravioli.
Vamos separando bolas de la masa que teníamos reservada y las vamos pasando por la máquina de pasta hasta que queden bien finas, si no quedará un ravioli muy basto.
Enharinamos una superficie de trabajo y depositamos ahí la primera lámina de pasta. Repartimos un poco de relleno sobre ella y le ponemos otra “sabanita” de pasta encima. Sellamos un poco con los dedos los bordes de los montoncitos que nos han quedado y ya podemos cortar los primeros ravioli. Y así seguimos hasta que gastemos toda la pasta y todo el relleno.
Una vez formados todos, ponemos agua con sal a hervir y cuando llegue a ebullición, introducimos nuestros ravioli caseros y los hervimos durante aproximadamente 4-5 minutos.
Una vez cocidos, los escurrimos, les ponemos nuestra salsa deliciosa y a la mesa a ponerse las botas!
Ya veréis como ha valido la pena entretenerse. Siento deciros que no volveréis a comprar más de los que venden elaborados, si es que los habéis comprado alguna vez…
Buen provecho chefs!!