Quién quiere hacer un viaje por el lado oscuro de los postres y probar esta tentación de sobremesa? Se trata de una mousse suave de plátano sobre una base de membrillo. El dulzor natural del plátano hace que apenas necesitemos ponerle azúcar, y el contraste de la textura fina de la mousse con la consistencia del membrillo lo hacen un postre de los de hacer ruidito con la cuchara intentando sacar más y más de la copa ya vacía! Además nos sirve para aprovechar esos plátanos que en verano maduran en 10 minutos. Vamos a ella dulces chefs??
Lo primero que haremos será meter los plátanos en un recipiente donde los podamos triturar, añadirles el azúcar y con una batidora de mano, batirlos hasta obtener una textura puré. Reservamos en la nevera.
A continuación montamos la nata y la reservamos en la nevera también.
Ahora cogemos el membrillo y ponemos una capa de unos 6-7 mm en la base de los vasitos donde vayamos a servir el postre.
Sacamos la nata montada y los plátanos triturados de la nevera y los mezclamos cuidadosamente, de abajo a arriba hasta que ambos ingredientes estén completamente integrados.
Repartimos esta mezcla en los vasitos con membrillo, cubrimos con papel film y dejamos enfriar un mínimo de 4 horas.
A la hora de servir, les añadimos un par de frambuesas a cada uno y voilà!
Nuestra dulce tentación está lista para disfrutarla, sin remordimientos, hoy un poquito de nata y mañana compensamos.
Disfrutadlo!!
Ingredientes
Pasos
Lo primero que haremos será meter los plátanos en un recipiente donde los podamos triturar, añadirles el azúcar y con una batidora de mano, batirlos hasta obtener una textura puré. Reservamos en la nevera.
A continuación montamos la nata y la reservamos en la nevera también.
Ahora cogemos el membrillo y ponemos una capa de unos 6-7 mm en la base de los vasitos donde vayamos a servir el postre.
Sacamos la nata montada y los plátanos triturados de la nevera y los mezclamos cuidadosamente, de abajo a arriba hasta que ambos ingredientes estén completamente integrados.
Repartimos esta mezcla en los vasitos con membrillo, cubrimos con papel film y dejamos enfriar un mínimo de 4 horas.
A la hora de servir, les añadimos un par de frambuesas a cada uno y voilà!
Nuestra dulce tentación está lista para disfrutarla, sin remordimientos, hoy un poquito de nata y mañana compensamos.
Disfrutadlo!!