Hoy os traemos un plato fino, sano, ligero, un arroz, con una protagonista que debería ser la reina de todas las cocinas, la borraja. Habréis escuchado muchas veces el refrán de que tal o cual cosa “ha quedado en agua de borrajas” cuando se quiere decir que lo que se esperaba ha quedado en nada, pues bien, os diré, como acérrima defensora de esta singular verdura que en su origen este dicho hacía referencia a la cerraja que era una especie de lechuga salvaje de la cual se obtenía un caldo de escaso valor alimenticio, pero como no era muy conocida, le otorgaron el desmerecido premio a su compañera más popular y de similar pronunciación. De hecho, en casa, cuando utilizamos una, las hojas siempre las aprovechamos para enriquecer el caldo de verduras o para hacer unos crespillos, que ya os mostraremos más adelante. Bueno, y después de esta manifestación de amor a la borrajica que es como la llamarían en la tierra de donde proviene, que os parece si empezamos? Vamos!
Para preparar este arroz empezaremos limpiando la borraja. Simplemente lavándola con agua, no hay que quitar pinchos, no se notan al comerlos, y tampoco se clavan en las manos, pero los más sensibles, podéis hacer uso de unos guantes si preferís.
Una vez limpia, la cortamos en trozos de unos 5-6 cm, la cocemos en agua con sal hasta que esté al dente, y una vez lista, reservamos tanto la borraja como el caldo.
Mientras se cuece la borraja, sofreímos un poco más de la mitad de la cebolla y un diente de ajo. Cuando esté ya transparentando, añadimos la harina y dejamos que se tueste sin dejar de remover.
Ahora añadimos el vino y la cantidad de agua necesaria hasta conseguir una salsita espesa.
Reservamos.
Ponemos las trompetas de la muerte a remojo para que se vayan hidratando, les costará unos 20 minutos, seguid siempre las instrucciones del fabricante, y si es época de setas y las habéis comprado frescas, tan sólo tendréis que lavarlas y cortarlas.
A continuación, lavamos y cortamos las setas ostra, calentamos aceite en una sartén y las freímos.
Una vez hechas, escurrimos las trompetas, las añadimos a la sartén y las cocinamos durante 2 minutos. Añadimos la salsa que habíamos dejado aparte. Reservamos.
Ahora calentamos aceite en una cacerola y pochamos el resto de cebolla y el otro diente de ajo. Cuando empiece a estar transparente, le añadimos el tomate hasta que el agua que suelte se haya evaporado. Añadimos entonces el pimentón, removemos y echamos el caldo de verduras, junto con el agua de cocer las borrajas, la mezcla de setas, sal y azafrán.
Vamos cociendo y corrigiendo de sal hasta que le encontremos el punto perfecto. Cinco minutos antes de echar el arroz, le añadiremos la borraja que habíamos hervido previamente para que no se deshaga.
Una vez en su punto de sal y con todos los ingredientes haciendo “ chup chup” añadimos el arroz y a poner la mesa.
Este plato de cuchara os transportará a otra dimensión y mucho me temo que lo haréis más de una vez durante este invierno.
Buen provecho!!
Ingredientes
Pasos
Para preparar este arroz empezaremos limpiando la borraja. Simplemente lavándola con agua, no hay que quitar pinchos, no se notan al comerlos, y tampoco se clavan en las manos, pero los más sensibles, podéis hacer uso de unos guantes si preferís.
Una vez limpia, la cortamos en trozos de unos 5-6 cm, la cocemos en agua con sal hasta que esté al dente, y una vez lista, reservamos tanto la borraja como el caldo.
Mientras se cuece la borraja, sofreímos un poco más de la mitad de la cebolla y un diente de ajo. Cuando esté ya transparentando, añadimos la harina y dejamos que se tueste sin dejar de remover.
Ahora añadimos el vino y la cantidad de agua necesaria hasta conseguir una salsita espesa.
Reservamos.
Ponemos las trompetas de la muerte a remojo para que se vayan hidratando, les costará unos 20 minutos, seguid siempre las instrucciones del fabricante, y si es época de setas y las habéis comprado frescas, tan sólo tendréis que lavarlas y cortarlas.
A continuación, lavamos y cortamos las setas ostra, calentamos aceite en una sartén y las freímos.
Una vez hechas, escurrimos las trompetas, las añadimos a la sartén y las cocinamos durante 2 minutos. Añadimos la salsa que habíamos dejado aparte. Reservamos.
Ahora calentamos aceite en una cacerola y pochamos el resto de cebolla y el otro diente de ajo. Cuando empiece a estar transparente, le añadimos el tomate hasta que el agua que suelte se haya evaporado. Añadimos entonces el pimentón, removemos y echamos el caldo de verduras, junto con el agua de cocer las borrajas, la mezcla de setas, sal y azafrán.
Vamos cociendo y corrigiendo de sal hasta que le encontremos el punto perfecto. Cinco minutos antes de echar el arroz, le añadiremos la borraja que habíamos hervido previamente para que no se deshaga.
Una vez en su punto de sal y con todos los ingredientes haciendo “ chup chup” añadimos el arroz y a poner la mesa.
Este plato de cuchara os transportará a otra dimensión y mucho me temo que lo haréis más de una vez durante este invierno.
Buen provecho!!