Lentitud, apatía, sueño…son sensaciones propias de la astenia, que suele aparecer tras las vacaciones y por la disminución de horas de luz.
Qué hacer?
En primer lugar prioriza las tareas y, si no puedes con todo, delega.
Respira bien
Respirar de manera poco profunda impide aprovechar todos los beneficios que el oxígeno aporta al organismo. Prueba este truco: Inhala por la nariz, retén el aire dentro y exhala por la boca, sin prisas. repite el proceso 10 veces seguidas y verás que te sentirás más animad@ y notarás que te cansas menos, evitarás la ensión muscular y mejorarás la digestión y la concentración.
No olvides la dieta energética
Hay nutrientes que no pueden faltarnos.Los carbohidratos impiden los bajones de energía, así que no olvidemos en nuestra dieta diaria incluir pan, pasta o arroz.
La jalea real nos aporta mucha energía, refuerza las defensas y potencia la concentración mental.
Los alimentos con calcio, potasio, magnesio y vitaminas del grupo B también pueden ayudarnos a combatir el cansancio y decaimiento, así que es importante que no dejemos de lado alimentos como los plátanos, las emillas de chía, lino y sésamo, las almendras, los huevos, el chocolate negro, los cereales integrales, las legumbres, el aguacate, el tempeh y el tofu.
Exposición saludable al sol
Y por último el exponernos al sol cada día nos hará sentirnos con más energía y vitalidad, ya que ayuda a subir los niveles de serotonina.
Así que a alimentarnos bien, olvidarnos del sedentarismo y sacar de la cabeza la palabras » síndrome post-vacacional», qué es eso??? nada para nosotr@s que nos comemos el mundo!!!