Los meses de transición, de temperaturas suaves, suelen sentarnos bien.
Los expertos han demostrado que en otoño la mayoría de personas duerme 2,7 horas más al día que en otros meses del año.
Órganos limpios y protegidos
En tu despensa otoñal no deberían faltar algunas plantas medicinales.
Por ejemplo, el boldo que limpia el hígado y facilita que éste cumpla mejor con su función de depurador del organismo; la cola de caballo, que favorece la eliminación de orina y cuida tus riñones; y el tomillo, un antibiótico natural, digestivo y tónico para los pulmones.
Alimentos capaces de calmar el dolor
Existe una alimentación que favorece el dolor y otra que ayuda a reducirlo.
En el primer caso el abuso de grasas saturadas y azúcares refinados puede provocar la inflamación crónica de tejidos y dan lugar a molestias articulares.
Los nutrientes de efecto analgésico en cambio, acallan neurotransmisores que activan las neuronas para que “sientan” dolor.
Consume verduras y frutas frescas y si es posible añade toque de picante o cúrcuma.
Si estás cansado muévete más
La vida sedentaria actúa ralentizando el transporte de oxígeno a los órganos y esto contribuye a aumentar la fatiga.
Rompe con este círculo vicioso y apuesta por una vida más activa.
FELIZ COMIENZO DE OTOÑO Y MEJOR MES DE OCTUBRE!!